-¿Te has tatuado un diamante? ¡Hala! ¿Y eso? ¿Por qué un diamante?
(Sí, son las típicas preguntas que me ha hecho la gente).
Para aquellos que preguntan...«Diamante» viene del griego, y tiene como significado: «propio», «inalterable», «irrompible» e «indomable».
El diamante tiene la más alta dureza y conductividad térmica de todos los materiales, puede ser contaminado por pocos tipos de impurezas y tiene habilidad para dispersar luz de diferentes colores.
Se le atribuye el poder de quitar las pesadillas, neutralizar el veneno, alejar el mal, proteger de las bestias salvajes, curar las enfermedades y atraer buena fortuna.
El diamante simboliza la búsqueda de la perfección, la voluntad, el triunfo, la firmeza y la rectitud. Equilibra las cualidades personales y eleva toda la energía física a un nivel superior.
Pero eso no son más que definiciones, definiciones que la gente quiere sobre los diamantes. Lo que muchos no saben es que detrás de un pequeño diamante puede haber una gran historia. Historias que marcan tu vida, que son parte de tu día a día, de esas que les contarás a tus hijos cuando seas mayor. Y de esas que cuando te vienen a la memoria, te sacan una sonrisa. Y no falla nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario